Hay muertos demasiados
Para Lisi Prada
Hay muertos demasiados
que turban el silencio
con su llanto.
Madrugadas que están
sus vísceras expuestas
en la feria.
Bucean
fantasmagóricas almas
dando cuerda a
relojes digitales.
Del árbol del profeta
caen las hojas
en las fosas comunes
del erario.
El camino de vuelta
no es camino de siembra,
es recogida.
La vida parecía tan real como un cuento.